Starlink, la división de comunicaciones satelitales de SpaceX, ha alcanzado un hito importante con el despliegue de su primera constelación de satélites diseñada específicamente para permitir llamadas móviles con cobertura satelital. Tras recibir la aprobación regulatoria necesaria en Estados Unidos, la empresa dirigida por Elon Musk se prepara para lanzar este servicio revolucionario en 2025, un avance que podría redefinir las telecomunicaciones globales.
Llamadas móviles sin zonas muertas
El principal atractivo de esta nueva tecnología es la posibilidad de realizar llamadas desde cualquier rincón del mundo, incluso en áreas remotas o sin cobertura terrestre. Según SpaceX, los satélites Starlink Direct to Cell funcionarán como torres de telecomunicaciones espaciales, ofreciendo una conexión directa entre los teléfonos móviles y el satélite sin necesidad de equipamiento adicional. Esto permitirá a los usuarios mantenerse conectados en lugares tan inhóspitos como el océano o áreas montañosas, eliminando por completo las «zonas muertas» de cobertura.
El despliegue de la constelación
La compañía ya ha puesto en órbita un total de 20 satélites adicionales mediante su cohete Falcon 9, de los cuales 13 están específicamente diseñados para ofrecer comunicación directa con dispositivos móviles. En total, Starlink cuenta con más de 300 satélites orbitando el planeta, parte de los cerca de 7.000 que SpaceX ha lanzado desde el inicio de su programa.
Estos satélites no solo son innovadores por su funcionalidad, sino también por su capacidad técnica. Los nuevos modelos pueden proporcionar un ancho de banda de hasta 10 Mbps, suficiente para garantizar una comunicación fluida y sin interrupciones. SpaceX ha señalado que este es solo el principio, y que en el futuro espera aumentar significativamente el rendimiento de estos sistemas.
Colaboraciones estratégicas y proyección global
Inicialmente, Starlink ofrecerá su servicio de llamadas satelitales en colaboración con T-Mobile, una de las principales operadoras de telecomunicaciones en Estados Unidos. Sin embargo, la compañía ya ha manifestado su intención de ampliar este modelo a nivel global, abriendo la puerta a negociaciones con operadoras de otros países, incluidas las españolas.
«Estamos abiertos a colaborar con cualquier operadora que quiera integrar nuestra tecnología en su oferta de servicios», declaró recientemente uno de los directivos de SpaceX. Este enfoque subraya la ambición de Elon Musk de convertir a Starlink en un referente mundial en conectividad satelital, con el objetivo de que las llamadas móviles desde satélite se conviertan en un estándar global.
Hacia un futuro sin límites de conectividad
Este avance llega después de que Starlink probara con éxito, en 2024, su servicio de mensajería SMS a través de satélites. Las llamadas móviles representan el siguiente paso en una estrategia destinada a democratizar el acceso a la comunicación, especialmente en situaciones de emergencia o en áreas donde las infraestructuras tradicionales son inexistentes.
Además de su impacto en las telecomunicaciones personales, este tipo de tecnología podría tener aplicaciones cruciales en sectores como la navegación marítima, la aviación y la gestión de desastres naturales, proporcionando una red confiable y resistente en los momentos más críticos.
Un paso adelante en la carrera espacial
La apuesta de Starlink por las llamadas móviles desde el espacio es un testimonio del constante esfuerzo de SpaceX por innovar en el sector aeroespacial y de telecomunicaciones. Mientras Elon Musk sueña con una conectividad sin fronteras, la realidad es que su proyecto ya está marcando un antes y un después en cómo las personas y empresas se comunican en un mundo cada vez más interconectado. Si todo sale según lo planeado, 2025 podría ser el año en el que las llamadas satelitales se conviertan en una herramienta esencial de comunicación global.
