El Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 ha puesto nombres y apellidos a parte del fraude del último Black Friday. Cinco grandes operadores de comercio electrónico han sido sancionados por aplicar descuentos engañosos durante la campaña de noviembre de 2023: Notino Italia, Gestaweb 2020, MediaMarkt, Carrefour y PC Componentes.
En total, las multas superan los 350.000 euros, a las que se suma una sanción de carácter publicitario: la obligación de hacer públicos los nombres de las empresas infractoras, algo que hasta ahora no siempre ocurría y que busca reforzar el efecto disuasorio.
Rebajas que no lo eran
Según ha explicado Consumo, las compañías sancionadas vulneraron la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios, concretamente el artículo 47.1, que prohíbe las prácticas comerciales desleales.
Las cantidades impuestas son las siguientes:
- Notino Italia: 110.000 €
- Gestaweb 2020: 100.000 €
- MediaMarkt: 25.000 €
- Carrefour: 21.500 €
- PC Componentes: 1.500 €
Otros dos expedientes siguen en marcha y, por la naturaleza de las sanciones, sus destinatarios no se han hecho públicos todavía.
En uno de los casos citados por el Ministerio, el producto afectado era un patinete eléctrico cuyo precio se modificó en varias ocasiones entre el 1 y el 27 de noviembre de 2023. La maniobra buscaba inflar el precio “normal” en días previos para que la rebaja anunciada en Black Friday pareciera mucho más atractiva de lo que realmente era.
La Ley de Ordenación del Comercio Minorista es clara en este punto: el precio que se toma como referencia para calcular un descuento debe ser el más bajo ofrecido en los 30 días anteriores. Manipular esa referencia convierte la rebaja en una mera ilusión.
Campaña de vigilancia reforzada en 2024
El ministro Pablo Bustinduy ha anunciado que este año se ha puesto en marcha una nueva campaña de vigilancia tecnológica sobre Black Friday y Cyber Monday. El objetivo es detectar:
- Subidas artificiales de precios en las semanas previas.
- Supuestos descuentos construidos sobre precios que nunca existieron.
- Otros “patrones oscuros” (dark patterns) que empujan al consumidor a comprar sin toda la información.
Esta campaña da continuidad al trabajo de inspección realizado en años anteriores y que ha desembocado en los expedientes ahora publicados. Además de las multas económicas, las empresas han tenido que retirar o corregir las rebajas engañosas detectadas.
Qué entiende Consumo por “rebaja falsa”
Las autoridades ponen el foco en varias conductas que, aunque se han normalizado en el comercio online, son claramente ilícitas:
- Precios por goteo: cargos adicionales que solo aparecen al final del proceso de compra —tasas, suplementos obligatorios, gastos de gestión— y que no se mostraban en el precio inicial.
- Venta bajo presión: mensajes del tipo “solo queda 1 unidad”, “X personas están viendo este producto” o relojes de cuenta atrás irreales que generan una urgencia artificial.
- Precios dinámicos opacos: cambios de precio durante la compra sin explicar los motivos (hora del día, dispositivo, historial del usuario…).
- Precios personalizados según el perfil: ofertas diferentes para cada consumidor basadas en sus datos personales, que pueden resultar discriminatorias.
- Comparaciones de precios engañosas: mostrar como “precio anterior” una cifra que no ha sido el precio real, habitual o más bajo en el último mes.
Estas prácticas se apoyan en el enorme volumen de datos que manejan las plataformas y en técnicas de diseño pensadas para empujar al usuario a comprar rápido, con la sensación de estar ante una oportunidad irrepetible.
El papel del consumidor: cómo protegerse
Aunque el grueso de la responsabilidad recae en las empresas —y en las administraciones que deben vigilar su conducta—, los expertos en consumo recomiendan algunos hábitos básicos para evitar caer en las falsas rebajas:
- Comparar precios con anterioridad: anotar el precio de los productos semanas antes del Black Friday ayuda a detectar subidas sospechosas.
- Desconfiar de los descuentos “gigantes”: cuando una rebaja parece demasiado buena para ser verdad, conviene revisar el historial de precios en comparadores o portales especializados.
- Leer bien las condiciones: comprobar si el precio incluye impuestos, envío y tasas diversas, y fijarse en la letra pequeña.
- Guardar capturas de pantalla y facturas: pueden ser clave para reclamar si el precio mostrado y el cobrado no coinciden.
La publicación de estas sanciones lanza un mensaje claro al sector: el Black Friday no puede ser una carta blanca para el engaño. La gran campaña del consumo prenavideño seguirá siendo un momento clave para el comercio, pero cada vez estará más vigilada. Y, si algo demuestran los expedientes ahora conocidos, es que las rebajas falsas ya no salen tan baratas.
vía: ecommerce-news.es
