El fin de la regulación de la fibra NEBA y sus implicaciones

La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha dado un paso histórico en el mercado de las telecomunicaciones al anunciar el fin de la regulación que obligaba a Telefónica a compartir su red de fibra óptica NEBA (Nuevo Ethernet de Banda Ancha) en ciertas zonas del país. Este cambio entrará en vigor en 2025, otorgando a Telefónica mayor libertad para gestionar su infraestructura, un movimiento que marca el fin de una era de estricta supervisión sobre el antiguo monopolio.

Telefónica pierde el liderazgo pero gana autonomía

Desde la fusión de Orange y MásMóvil en MásOrange, Telefónica dejó de ser el operador líder por número de clientes, posición que había mantenido desde la liberalización del sector. Esta nueva configuración del mercado, junto con el auge de las ofertas low cost, ha llevado a la CNMC a relajar las restricciones que pesan sobre Telefónica, permitiéndole competir en igualdad de condiciones.

La regulación actual divide el país en dos zonas:

  • Zona competitiva: Desde 2016, se han ido ampliando las ciudades donde Telefónica no está obligada a compartir su red de fibra. Comenzó con 66 municipios y se expandió en 2021 a 696, cubriendo el 30% de la población.
  • Zona no competitiva: En estas áreas, principalmente rurales, Telefónica debía ofrecer acceso a su red bajo condiciones reguladas, con tarifas más altas para los clientes y menos promociones.

Con la eliminación de esta regulación, la CNMC reconoce la evolución del mercado y el crecimiento de redes alternativas como el FWA 5G y el satélite, lo que reduce la dependencia de la red de Telefónica.

Seis meses para renegociar acuerdos

Tras la publicación oficial de la resolución en el Boletín Oficial del Estado (BOE), los operadores que utilicen la red de Telefónica tendrán un plazo de seis meses para renegociar las condiciones. Pasado este tiempo, Telefónica será libre de establecer acuerdos privados o decidir cómo explotar su infraestructura sin restricciones regulatorias. Este nuevo escenario podría fortalecer los acuerdos privados de compartición, ya populares entre rivales como Vodafone, MásOrange y Digi.

Además, Telefónica ha impulsado la creación de fibercos como BlueVía y acuerdos con otras compañías para compartir la propiedad de su infraestructura y optimizar su uso.

Impacto en los consumidores

El fin de la regulación tiene implicaciones directas para los consumidores:

  1. Zonas competitivas: Podría mejorar la oferta y las promociones, ya que los operadores tendrán incentivos para competir de forma más directa.
  2. Zonas no competitivas: Los clientes en áreas rurales podrían enfrentarse a precios más altos y menor acceso a ofertas promocionales.

Por otro lado, la competencia de tecnologías como Starlink y FWA 5G podría ofrecer nuevas opciones en estas zonas, disminuyendo la dependencia de una sola red.

Consultas abiertas para el sector

La CNMC ha abierto un proceso de consulta pública para recabar opiniones del sector antes de la publicación de la resolución final. Este movimiento busca garantizar que los intereses de operadores y consumidores se equilibren en un mercado en constante transformación.

Una nueva etapa para las telecomunicaciones en España

La eliminación de la regulación NEBA marca un antes y un después en la estructura del mercado español. Telefónica deja atrás décadas de supervisión estricta, mientras el sector se prepara para una mayor competencia tecnológica. El desafío será garantizar que este cambio beneficie a los consumidores, fomentando precios justos, innovación y acceso a servicios de alta calidad en todas las regiones del país.

vía: BandaAncha

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